Los médicos de la Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia determinaron que es imposible separar a las siamesas que nacieron en el centro el pasado viernes, debido a que comparten varios órganos vitales.
Las siamesas comparten un misma arteria aórtica, que es la que suple de sangre al corazón, utilizan el mismo hígado, iguales riñones, todo el tracto genitourinario y un solo intestino.
La información la ofreció la doctora Yolanda Grullón, gerente de perinatología del hospital.
La atención médica que da el centro a las niñas es básicamente de soporte y vigilancia, pero tanto médicos como familiares mantienen la esperanza de que sobrevivan, pese a la poca probabilidad.
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