viernes, 10 de mayo de 2013

Frank Jorge Elías mantenía a su esposa en estado de esclavitud, según Fiscalía


Llegó a agredirla con una correa, de acuerdo al documento de solicitud de coerción del Ministerio PúblicoEl empresario Frank Jorge Elías mantenía a su esposa Sandra Kurdas, quien lo acusó de violencia física, en una especie de esclavitud del siglo XXI, que no le permitía tener amigos, de acuerdo a al documento de pedido de coerción del Ministerio Público.
El documento, del cual obtuvo copia elCaribe, señala que el imputado, a quien hoy conocerán medida de coerción, le tenía prohibido a su esposa salir de la casa de noche, conducir vehículos, tener amigos y hablar cuando estaban en compañía de particulares. Igualmente, ejercer su carrera de doctora.
"El sometimiento y maltrato a la víctima es tal que la misma pasaba más tiempo en su closet-vestidor que en el resto de la casa", indica el texto.
Además la insultaba contantemente, añade la Fiscalía, y le decía que ella no servía ni para marcar un teléfono.
“El imputado le enviaba a la víctima correos que del análisis de los mismos se evidencia que realmente ejerce una fuerte violencia psicológica sobre la víctima, además la llamaba constantemente y le dejaba mensajes amenazantes y llenos de insultos, situación que provocó que las autoridades judiciales de Miami le otorgaran a la víctima una orden de protección”
"Hechos que se acreditan con la declaración dela víctima, su comportamiento excesivamente sumiso, más allá de lo razonable y la prueba psicológica que arroja resultados totalmente coherente con lo declarado por la víctima", agrega.
La violencia de Jorge Elías hacia Kurdas, con quien procreó cuatro hijos, también  fue física, llegando incluso a golpearla con una correa en la habitación matrimonial en la torre Alco Paradisso, en fecha 11 de junio de 2012 a las 11:00 de la noche.
El documento agrega que esa noche, Jorge Elías impidió que la hija de ambos, Priscila, la llevara a un centro médico y la víctima pasó la noche sin asistencia médica y que al día siguiente se fue a casa de sus padres en Miami, donde permaneció un año hasta que volvió al país para el proceso que sometió.
Tras ella irse, añade la Fiscalía, el imputado inició una campaña de descrédito contra Kurdas, que incluyó la manipulación de sus hijos, uno de los cuales dijo que el asunto fue una "pendejada".

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