La primera fallecida fue identificada como Diana Carolina Guerrero, de 30 años, que murió de asfixia por inmersión, según el diagnóstico del médico legista.
Su cadáver fue hallado ayer por pecadores en las aguas del río Duey, municipio de Boca de Yuma de la provincia Altagracia, quienes lo trasladaron a la orilla e informaron a las autoridades policiales, que de inmediato se presentaron en el lugar donde realizaron las pesquisas correspondientes.
El hermano de la fallecida, Carlos Manuel Mota, declaró que la víctima estaba diagnosticada con una enfermedad mental y de epilepsia, y que la última vez que la familia vio con vida fue la mañana del día 6 de septiembre, cuando ésta deambulaba, como era habitual, por la zona aledaña donde fue encontrada, próxima a su residencia.
Mientras, en el sector Los Frailes II de Santo Domingo Este falleció electrocutado Timoteo Castro Zapata, de 61 años, conforme al diagnóstico del médico legista.
Según la declaración de su hijo Kelvin Castro de la Rosa, de 24 años, este se encontraba encima de un poste de energía eléctrica conectando un cable de su residencia cuando recibió la descarga eléctrica que lo derribó, cayendo al pavimento, de donde fue levantado y trasladado al hospital Darío Contreras al que llegó sin signos vitales.
Los cadáveres fueron enviados hacia la oficina regional del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) de San Pedro de Macorís, y al Instituto Nacional de Patología Forense, respectivamente, para practicarles la necropsia pertinente. EFE
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