Mariana Iacono expone sus criterios como líder latinoamericana juvenil viviendo con VIH. Es un ejemplo de vida en plenitud, incluyendo su sexualidad. A la derecha Ramón Acevedo habla de estima a los niños y jóvenes participantes. SAMANA. En un ambiente de casi indefinible paz que se respira en el Centro de Formación Integral Juventud y Familia, de la Iglesia Católica, una audiencia de 33 niños y jóvenes que viven con el virus del VIH protagonizan hasta manana jueves el II Encuentro Nacional de Jóvenes Positivos al VIH, a fin de desarrollar un liderazgo juvenil con esa condición, para trabajar en el sentido de abolir el estigma y la discriminación social, participar internacionalmente en la red latinoamericana y del Caribe que los reúne y que tendrá en diciembre próximo, en la ciudad de Panamá, su asamblea constitutiva, en la cual participarán dos de los jóvenes quisqueyanos.
Para conducir el taller, el Consejo Nacional del VIH y el Sida, invitó desde Argentina, a la trabajadora social y gestora de estos derechos Mariana Iacono, VIH positiva desde hace 10 años (tiene 29) y quien ha desarrollado frente a estos muchachos y muchachas con edades entre 13 y 17 años, los temas de apoderamiento, autoestima y discriminación.
Es un ejemplo
Mariana es una mujer sumamente atractiva, dotada de vitalidad, portadora de la imagen “baby face”, a quien la mentalidad de un hombre ordinario podría asociarla con cualquier condición, menos con el virus del VIH. Ella es una fuente de conceptos novedosos, de proclamas por la vida y que ubica la presencia del virus en su cuerpo, a la cotidianidad normal que no le impide el desarrollo de una existencia plena.
Mariana es una activista y militante en la Red Argentina de Mujeres Viviendo con VIH/Sida, es una de las fundadoras de la Red Argentina de Jóvenes y Adolescentes Positivos, activista de la Red de Jóvenes Positivos LAC y forma parte del liderazgo de la Red Argentina de Personas que Viven con VIH. Trabaja asalariadamente en dos escuelas secundarias con jóvenes agredidos o abusados. Entrena su cuerpo con aparatos en el gimnasio, cuatro veces por semana. Su pasión en la vida es nadar en el mar y toma sus anti-retrovirales puntualmente cada día.
Adherencia a la vida
La líder juvenil sostiene que tener el virus no implica un rompimiento de la representación social y sostiene que se impone terminar con todos los prejuicios de los años 80: “que son gays, las trabajadoras sexuales, que tienen marcas, que son enfermas, demacradas, que son sólo personas en situación de pobre”.
“La gente sigue creyendo que si soy tal cosa puedo tener VIH, igual si me acuesto con muchas personas o si pertenezco a los grupos vulnerables como se les llamaba antes. No estamos demacrados, no tenemos una señal, o un letrero o algún síntoma que nos identifique. En mi caso no soy trabajadora sexual, no soy promiscua y tengo siempre relaciones con protección “.
Recuerda una verdad de puños: cualquier persona que tenga relaciones sexuales sin preservativo puede adquirir y vivir con VIH.
Entiende que lo clave es tener adherencia a la vida, no sólo a los medicamentos, tomándolos cada día a la misma hora. Si no tengo ganas de vivir, los medicamentos, no tienen el mismo efecto.
“Si yo, Mariana tengo prejuicios ¿cómo voy a trabajar por los demás? Yo tuve prejuicios durante un año. Cuando iba al servicio de salud a buscar mis medicamentos me preguntaba por qué estoy con este problema si aquel señor se ve que es mujeriego, o aquella mujer que debe ser trabajadora. Después entendí que no, que en realidad el virus del VIH y el sida tiene que ver con tener relaciones sin protección”, expresa Iacono.
“Se impone tener adherencia a la vida, a los medicamentos, como tengo autoestima firme, mi actitud cambia. Si no tengo una buena actitud ante mi misma, los medicamentos no me harán el mismo efecto” dice en esta conversación cargada de la intensidad con que expone sus ideas.
Kiara Mariano
La más destacada lider juvenil dominicana viviendo con VIH es Kiara Leticia Mariano Mieses, una joven mulata de ojos verdes impresionantes que vive en Hacienda María, que descubrió por ella misma que era portadora y que, estando sola, ha decidido impulsar la lucha por los derechos de sus iguales.
"Estoy sola en el mundo y me quedó sola luchar en el mundo. Me identificqué con mi condición y me dije que sería una líder juvenil, ejerciendo un papel de responsabilidad social a partir de mi condición.
Llama a los jóvenes y niños que se apoderen que sepan lo que es el VIH y el sida, que no acepten ser discriminados y que puedan proclamar sin temor alguno: "Vivo con el VIH, soy un ciudadano o ciudadana y tengo derechos".
Ha nacido un nuevo liderazgo juvenil en el país.
El dato
En la Web
Mariana Iacono como activista de los derechos de la niñez y juventud con VIH, tiene los siguientes medios web de comunicación: http://www.pasionporlavida.org/blog/ y http://host.hojablanca.net/colombia-se-enamorara/tag/prejuicios/
UN APUNTE
¿Decirlo o no?
Para una mujer con VIH, la vida sexual le plantea la interrogante sobre si decir o no a su pareja que tiene esa condición. Mariana Iacono, respaldada por la Ley Argentina, reivindica el derecho de decirlo o no, considerando que es suficiente con tomar las medidas de protección para un sexo ejercido con seguridad y responsabilidad. En su caso lo tiene declarado en su página de Facebook:https: //www.facebook.com/mariana.iacono1
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