Desde hace unas tres semanas, la fiebre chikungunya ha empezado a hacer estragos en los más populosos sectores de la capital, obligando a sus residentes a acudir en busca de atención a los principales hospitales, donde la alta demanda de atención está acentuando aún más las precariedades con que operan los centros.
La cantidad de pacientes febriles y con otras características propias de la chikungunya que reciben, que oscila entre los 100 y 150 pacientes diarios, mantiene preocupado al personal de salud, que afirma verse obligado a trabajar prácticamente con “ las manos peladas”.
Los hospitales, sobre todo del sistema tradicional, que son los más masivos, presentan no sólo escasez de espacio, medicamentos, material gastable, reactivos de laboratorio e insumos básicos, sino que están acumulando grandes deudas, ante la insuficiencia presupuestaria, agravada luego de la eliminación del cobro de la cuota de recuperación en agosto del año pasado.
“Aquí escasean hasta los guantes”, aseguran médicos del hospital Luis Eduardo Aybar, donde cada día se recibe un promedio de 60 adultos y 43 niños con síntomas de chikungunya. Esta realidad es secundada por pacientes que afirman que muchas veces tienen que salir a comprar hasta la jeringuilla que se va a utilizar para inyectarlos.
Un familiar de una parturienta criticó haber tenido que comprar un kit que le costó 3,000 pesos para que su pariente pudiera ser sometida a una cesárea, porque al hospital, aunque no cobra cuota de recuperación, el paciente debe llevar los materiales que se utilizan en la cirugía.
LISTÍN DIARIO supo extraoficialmente que, en lo que va de año, el hospital Luis E. Aybar sólo ha recibido dos subvenciones estatales, situación agravada porque no recibe ningún recurso extra luego de eliminada la cuota de recuperación.
Esto le deja desarmado para manejar los gastos del día a día. Aunque el gobierno anunció que destinaría 600 millones de pesos extra para cubrir esos fondos que los hospitales dejarían de percibir, en estos denuncian que no se han representado soluciones.
Serias precariedades, que incluyen una alta deuda y cierre de áreas por falta de servicio de agua, está afectando también al hospital Infantil Robert Reid Cabral, lo que ha motivado a que el Colegio Médico Dominicano (CMD) haya convocado para hoy a un encuentro con la prensa en la sede del centro asistencial.
Este hospital, apadrinado por la doctora Margarita Cedeño de Fernández durante su gestión como Primera Dama, que le llevó incluso a ser sometido a una amplia remodelación de su planta física, al parecer no está recibiendo un adecuado apoyo ni los recursos económicos suficientes para atender la alta demanda de atención que tiene diariamente, por tratarse de un centro de referencia nacional.
En condiciones similares operan además los hospitales Darío Contreras, Francisco Moscoso Puello, Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia y el materno infantil San Lorenzo de Los Mina.
Se informó que hospitales de los denominados autogestionarios, que habían eliminado el cobro de cuota de recuperación en áreas como emergencia y consulta, contemplan la posibilidad de volver a restablecerlo, ante las dificultades que registran para cumplir con sus compromisos con suplidores debido a que el presupuesto que reciben le resulta insuficiente.
RESIDENTES DE BARRIOS ABARROTAN HOSPITALES
Barrios populosos como la Ciénaga, María Auxiliadora, Los Guandules, Villa Mella, Las Américas, Los Tres Brazos, 27 de Febrero, Villa María, Guachupita, Los Mina, Los Frailes, Luperón, Capotillo, la Zurza, 24 de Abril y Villas Agrícolas son los que mayor cantidad de pacientes con fiebre, dolores articulares y rash en la piel, características propias de la chikungunya, aportan a hospitales como Luis Eduardo Aybar, Francisco Moscoso Puello y San Lorenzo de Los Mina.
Barrios populosos como la Ciénaga, María Auxiliadora, Los Guandules, Villa Mella, Las Américas, Los Tres Brazos, 27 de Febrero, Villa María, Guachupita, Los Mina, Los Frailes, Luperón, Capotillo, la Zurza, 24 de Abril y Villas Agrícolas son los que mayor cantidad de pacientes con fiebre, dolores articulares y rash en la piel, características propias de la chikungunya, aportan a hospitales como Luis Eduardo Aybar, Francisco Moscoso Puello y San Lorenzo de Los Mina.
También se reportan casos en diferentes barrios de Los Alcarrizos y de Herrera, entre ellos la Fe y Buenos Aires, que son atendidos en los hospitales Vinicio Calventi y Marcelino Vélez Santana. El Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina está recibiendo diariamente alrededor de 150 pacientes febriles, entre adultos y niños. También están llegando pacientes de comunidades como Boca Chica y la Caleta.
El viernes pasado en el hospital Aybar había nueve pacientes procedentes del barrio 27 de Febrero. El virus, cuyo primer brote se registró en febrero pasado en Nigua, San Cristóbal, mantiene en condiciones calamitosas al hospital Juan Pablo Pina y otros centros de salud de la zona, debido a que el número de pacientes que reciben a diario desbordan su capacidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario