El presidente Luis Abinader dijo estar abierto al diálogo, tras referirse a la huelga anunciada por un colectivo de organizaciones populares y sociales en 14 provincias del Cibao, para el próximo lunes y pidió a los convocantes al paro tener paciencia ante la situación por la que está atravesando la nación.
Sobre la queja por el alto costo de los combustibles, el mandatario dijo que en los actuales momentos es imposible que bajen, tras indicar que esa decisión no depende del gobierno que dirige, sino del comportamiento del mercado internacional.
“¿Cómo nos pueden pedir a nosotros que bajemos los combustibles? Eso es imposible señores”, enfatizó el gobernante durante su participación en el espacio radial “El Gobierno de La Mañana”, que se difunde por la emisora Z101 en un programa especial desde la provincia Monseñor Noel, tras el inicio de la cosecha de arroz.
Para el próximo lunes, un colectivo de organizaciones populares anunció una paralización en provincias del Cibao por 24 horas, para reclamar del gobierno una serie de reivindicaciones en la que se incluye una rebaja en los precios de los combustibles y del alto costo de la canasta familiar.
Con respecto al paro, aseguró que si algo tiene su gobierno, que hasta lo critican por eso, es que siempre tiene una puerta abierta a la comunicación y al dialogo con los todos los sectores.
“Lo que pasa es que cuando a usted le piden que bajen los precios de los combustibles, en momentos en el que gobierno está subsidiando los carburantes, que hoy los mismos están por primera vez en la historia más económicos que en Estados Unidos”, sostuvo el jefe de Estado.
Agregó en ese mismo orden, que solamente el subsidio a los combustibles para esta semana, que como se había planificamos van estar inalterables los precios, es de 1,200 millones de pesos.
“Entonces, ¿cómo nos pueden pedir a nosotros que bajemos los precios de los combustibles? Eso es imposible señores por ahora“, expreso el presidente Luis Abinader.
Citó el caso de las obras, que afirmó se están haciendo en San Francisco de Macorís, las cuales destacó llevaban décadas reclamaba por la población.
“Se están asfaltando todas las calles de esas provincias, ahora cuando te hacen una petición de arreglar todos los caminos vecinales, es decir, lo que no se ha hecho en 60 años de administraciones pasadas hay que hacerlo ahora”, dijo el mandatario.
Enfatizó, asimismo, que hay razones para el descontento en partes del país, pero recordó que tiene 20 meses al frente del gobierno, administrando en una crisis de una pandemia y aun así “hemos hecho más obras pequeñas que las que se habían realizado en las últimas décadas”.
“Por lo tanto, yo creo que aquellos que están en esa actitud deben de tener paciencia, comunicación con nosotros y pueden estar seguros que les vamos atender en un orden de las prioridades y según las capacidades de respuestas que tiene el gobierno por la crisis que hallamos”, expresó.
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