Para el director de la Pastoral Penitenciaria de la Iglesia Católica, padre Fray Arístides Jiménez Richardson, el penal de La Victoria “es una afrenta para la República Dominicana, en una sociedad democrática en la que vivimos”, por lo que solicitó al Estado cerrar ese recinto carcelario que alberga a unos 8,000 reclusos, cuando la capacidad inicial era para 1,000.
“El Estado dominicano en compañía de la sociedad debe trabajar y esforzarse para sustituir la Penitenciaria Nacional de la República. El problema de La Victoria es terrible. Casi 8,000 detenidos; esto tiene que ser un motivo de reflexión para el país. El problema del penal de La Victoria es un problema que afecta a toda la nación dominicana”, exclamó.
“La Procuraduría General de la República no tiene fuerzas para cerrar ese penal, ese es un problema de Estado”, dijo.
A esto le suma, agregó, que deben involucrarse los jueces, los fiscales, losministerios de Salud, Educación, Obras Públicas y el Congreso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario