Un día después de que mataran al ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Orlando Jorge Mera, los empleados fueron despachados de la entidad, sin apuntar una fecha de regreso a las laborares regulares.
Este martes esas oficinas gubernamentales muestran un refuerzo en su cuerpo de seguridad, colocando medidas como presentar su identificación ante las autoridades de las verjas perimetrales, así como también está prohibido el paso a quienes no sean empleados de esa institución.
Los pocos empleados que decidieron regresar a laborar estaban visiblemente afectados y consternados, por la muerte de quien fue su titular por dos años.
Tal es el caso de Martín Encarnación, Diandra Guzmán y Araselis Méndez, tres personas que en conversación con este diario expresaron estar en estado de "shock".
“No tengo palabras para lo que vivimos en este ministerio ayer”, agregó Encarnación.
Mientras que Méndez explicó que un principio a los empleados le habían notificado que “solo se trataba de un fuego”, razón por la que todos salieron, sin tener idea de que se trataba de la muerte de Jorge Mera.
El incidente
Orlando Jorge Mera murió en su despacho tras ser baleado en varias ocasiones por un amigo cercano, identificado como Fausto Miguel de Jesús Cruz de la Mota, quien huyó de la escena del crimen.
Posteriormente acudió a la iglesia Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, donde confesó su crimen, entregando el arma homicida al sacerdote encargado. En aquel lugar esperó a las autoridades, pidiendo que le garantizaran su vida.
Más tarde el Ministerio Público anunció que presentarán cargos en contra de Cruz de la Mota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario