El Supremo deberá tomar una decisión con premura debido al apretado calendario electoral,
El Supr
Washington.- La audiencia en el Tribunal Supremo de Estados Unidos que determinará si el expresidente Donald Trump (2017-2021) está inhabilitado para volver a la Casa Blanca por su papel en el asalto al Capitolio de enero de 2021 arrancó este jueves en la sede del máximo tribunal estadounidense.
En torno a las 10-10 hora local (15-10 GMT) dio comienzo la sesión, en la que los nueve jueces escucharán los argumentos orales para determinar si la expulsión de Trump de las primarias republicanas en el estado de Colorado es constitucional. Unas horas antes del comienzo, el expresidente volvió a acusar al Partido Demócrata de intentar eliminarlo de la papeleta electoral.
“Este es el mayor desafío legal que jamás hayamos enfrentado. Las discusiones ya han comenzado. Entonces, en este mismo momento, hago un llamado a todos los patriotas pro-Trump a que contribuyan y digan con orgullo- ¡mantén al presidente Trump en la papeleta!”, apuntó a través de un comunicado.
La decisión del Supremo, que no se conocerá hoy, podría alterar las elecciones presidenciales del próximo noviembre, en las que el magnate neoyorquino es el gran favorito para hacerse con la nominación republicana y batirse de nuevo con el presidente, Joe Biden, candidato demócrata. El Supremo deberá tomar una decisión con premura debido al apretado calendario electoral, pero los analistas dudan de que haya un fallo antes del supermartes del 5 de marzo, cuando 15 estados, incluido Colorado, celebrarán sus primarias.
La actual composición del tribunal está muy escorada a la derecha, con tres jueces progresistas frente a seis conservadores, tres de los cuales nominados por el propio Trump. Sin embargo, la corte no siempre ha estado del lado del republicano y desestimó sus denuncias de fraude electoral en 2020.
En un fallo sin precedentes, la Justicia de Colorado determinó en diciembre que la Enmienda 14 de la Constitución de EE.UU. inhabilita al republicano por la “insurrección” del asalto al Capitolio, cuando una horda de trumpistas atacó el Congreso para intentar frenar la ratificación de la victoria de Biden. Bajo el mismo argumento, las autoridades electorales de Maine también expulsaron a Trump de las primarias. Además, varios activistas y organizaciones han presentado demandas similares en al menos 11 estados y están pendientes de que el Supremo se pronuncie. En el centro del debate se encuentra la Sección 3 de la Enmienda 14 de la Constitución.
El texto establece que ningún “miembro del Congreso o funcionario de Estados Unidos” que haya jurado la Constitución y “participado en una insurrección o rebelión” podrá ser “electo presidente o vicepresidente”, entre otros cargos públicos. Esa enmienda fue aprobada en 1868, después de la guerra civil, con el objetivo de evitar que pudieran volver al poder los rebeldes sureños de la Confederación que traicionaron la Carta Magna.
Los dos bandos están enzarzados en un debate jurídico sobre si la enmienda se puede aplicar a Trump dado que el texto habla de “funcionario” pero no menciona explícitamente al presidente.
La defensa del republicano sostiene además que él no participó en ninguna insurrección dado que el día del asalto pidió a sus seguidores expresarse de “manera pacífica y patriótica”, mientras la acusación considera que incitó a la violencia antes y durante el ataque. Esta es la primera vez en la historia que el tribunal más alto del país escucha un caso relacionado con la Sección 3 de la Enmienda 14, un texto que había quedado en desuso después de que el Congreso amnistiara en 1872 a la mayoría de rebeldes confederados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario