Guillermina Arias (Maribel) tenía 38 años, cuatro hijos y trabajaba como empleada doméstica en la Capital, de lunes a viernes, para mantenerlos. El único recurso que contaba para “protegerse” de su expareja, quien la amenazaba y agredía constantemente, era una orden de alejamiento que le dio la fiscalía.
Pero ese documento no le protegió su vida, como ha ocurrido con otras tantas víctimas de feminicidios, y la noche de este domingo, su verdugo Jovanny de Jesús Hilario, un cobrador de guagua, le infirió siete puñaladas que les provocaron la muerte. El hecho ocurrió en la calle La Altagracia del sector Los Solares en Villa Altagracia.
“Era trabajadora, vivía para sus hijos, no tenía problemas con nadie y era muy buena persona” narró su hermana Isabel Arias a Listín Diario.
Maribel tenía aproximadamente varios meses separada de De Jesús Hilario, por las agresiones, gritos y amenazas de éste, y por las recomendaciones de sus cuatro hermanas, amigos y otros allegados, puso la denuncia en la fiscalía de Villa Altagracia donde le entregaron una orden de alejamiento, diez días antes de su muerte.
Según explicó Isabel, la noche de la tragedia el agresor llegó a casa de su hermana, “peleando como siempre”, cerró todas las puertas y la apuñaló reiteradas veces, sin que los vecinos pudieran hacer nada ante los gritos de auxilio de Maribel.Una vez la creyó muerta, según agregó, salió huyendo del lugar. Los vecinos la llevaron al hospital de Villa Altagracia y de ahí la trasladaron a Santo Domingo, pero falleció en el trayecto.
Los cuatro hijos de Maribel, de 16, 15, 12 y 10 años están al cuidado de su madre, quien se quedaba con ellos mientras su hija trabajaba en la semana.
En medio del dolor, la familia pide justicia y que el agresor sea condenado a la pena máxima.
“Que se cumpla la ley. Eso es lo que queremos, no que él muera, sino que pague en la cárcel por la muerte de mi hermana. Aquí en este país lamentablemente no se cumple la justicia, pero nosotros queremos una justicia limpia, con una condena de 30 años” exclamó la hermana de la víctima.
Los cuatro hijos de Maribel fueron procreados con su primer esposo.
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