Adolescentes con edades entre 14 a 17 años que se desplazan mayormente a pie y solitarios, es decir sin otras compañías, aprovechan descuidos de muchas mujeres para arrebatarles celulares, carteras y otras pertenencias, luego huyen velozmente, brincan como chivos paredes, vallas, barrancas y otros obstáculos, lo que impide muchas veces que personas y policías los atrapen.
“Cuando cometen sus delitos corren más que una guinea y una gacela, ese joven como de 16 años, le arrancó una cadena a una señora, los perseguimos, pero escapó, porque corrió mucho y brincan por donde quiera y no hay quien le de alcance, refirió al Listín Diario el ex sargento policial Ramón Ponce que presenció junto a otra persona un despojo en la avenida las Carreras, de esta ciudad.
“Caminaba por la calle R. César Tolentino, llegando a la escuela superior de maestros Emilio Prud, Home y un jovencito de unos 15 a 16 años, me arrebató el teléfono y luego huyó”, se quejó la profesora Natalia Amarante.
Por igual, sostiene que un grupo de personas lo persiguieron, pero que no le dieron alcance, porque corría mucho y que la despojó de su cartera y su celular.
En carros públicos
En diferentes rutas de Santiago, usuarios han reportados en la Policía muchos asaltos, que según los afectados, son cometidos por dos hombres y una mujer de tes blanca y gorda a la vez.
Aunque en menor proporción que en los varones, también adolescentes de sexo femenino acompañan a hombres en esas acciones delictivas, de acuerdo a afectados.
Policia no hace caso.
Las personas afectadas se quejan de que cuando van a la Policía es para perder el tiempo y que por eso prefieren denunciar los casos en los medios de Comunicación, para que la ciudadanía tome nota.
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