Un negociante fue asesinado de varios disparos la madrugada de ayer, supuestamente por agentes de la Policía Nacional, que lo habrían confundido con un ladrón en su residencia del sector Los Rieles de Gurabo de esta ciudad.
Daniel Antonio Rodríguez Céspedes, de 41 años, fue identificado como la persona acribillada a tiros alrededor de las 5:00 de mañana.
La versión de los familiares establece que Rodríguez Céspedes sintió que rompieron la puerta del primer nivel de su residencia, y supuestamente hizo un disparo, pensando que se trataba de ladrones que intentaban irrumpir en su vivienda.
De inmediato, según la versión, los agentes policiales que se encontraban en el lugar abrieron fuego sin mediar palabras, matando a Rodríguez Céspedes de múltiples disparos.Las paredes de la vivienda presentan al menos 17 orificios por impactos de balas. En ese espacio también se observó un abundante charco de sangre.
Las investigaciones
En la mañana de ayer, a la residencia de Rodríguez Céspedes se presentaron alrededor de 40 agentes de la Policía, incluyendo de Acción Rápida y la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), para hacer los levantamientos de lugar. Los familiares de Rodríguez Céspedes dijeron que los agentes se llevaron monitores, casquillos, discos duros de las cámaras de seguridad, e incluso, dinero. Aseguran que ellos “vinieron a robar”.
Fausto García Comanchi, cuñado de la víctima, consideró que al comerciante lo mandaron a matar, sin ofrecer mayores detalles. Dijo esperar que las investigaciones esclarezcan las verdaderas circunstancias en que ocurrió el hecho.
Se suicida tras atraco
Como resultado de otro hecho de violencia en Santiago, ayer eran velados los restos de Yolanda Altagracia Rodríguez, de 49 años, quien se quitó la vida luego de que atracadores a bordo de una motocicleta le arrebataran su cartera y le llevaran 74 mil pesos, en un hecho ocurrido el pasado lunes en la calle 8 del sector de Buenos Aires, en la parte norte de Santiago.
Familiares informaron que la impotencia embargó a Rodríguez, por no saber cómo iba a reponer el dinero que los malhechores le robaron. Este fue el detonante para que tomara la decisión de terminar con su vida. Hoy sus familiares, lloran su partida.
La mujer, de 49 años, era empleada de una banca de lotería ambulante, y se disponía a entregar el dinero producto de la venta del día a su supervisor cuando dos hombres, a bordo de una motocicleta, la atracaron.
Josefina Rodríguez, pariente de la occisa, dijo que desde que Yolanda Altagracia fue víctima del atraco, entró en un estado depresivo, que la llevó a cometer el hecho.
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