Miles de dominicanos de diferentes puntos del país se trasladaron hoy hasta la basílica de Higüey (este) para venerar la imagen centenaria de la Virgen de la Altagracia ante la que cumplen promesas en su nombre o solicitan su intervención divina en la solución de variados problemas.
A las peregrinaciones al santuario de la madre espiritual de los dominicanos acuden personas como Nairoby Mora, de la provincia San Cristóbal (sur), contigua a Santo Domingo, quien llevó ante la imagen a su hija Angie Massiel, de un año.
La joven madre contó a medios de prensa en Higüey que la pequeña Angie nació en críticas condiciones y que ella prometió a la Virgen de la Altagracia que si ayudaba a salvarla llevaría la niña en procesión hasta su imagen vestida de blanco y con un velón grande.
"Ella está (Angie Massiel) completamente sana y eso se lo debo a la virgen", agregó la mujer.
Este y otros testimonios se repiten cada año en la amplia explanada de la basílica y su venerada imagen, cuya devoción comenzó, según la historia, en 1502, cuando el lienzo fue traído desde España por los hermanos Alfonso y Antonio Trejo.
La pintura, restaurada por última vez en 1978, muestra a la virgen contemplando en el pesebre al recién nacido Jesús, mientras detrás observa José.
La imagen fue coronada por primera vez en 1922, durante el pontificado de Pío XI, y en 1992, cuando la segunda visita al país del Papa Juan Pablo II.
En decenas de comunidades del interior de la República Dominicana se guarda esta fecha a ritmo de música de atabales que se extienden hasta el amanecer.
Las autoridades de socorro han dispuesto un amplio operativo en las carreteras principales del país, principalmente en la autopista Las Américas que comunica a Santo Domingo con el este.
La conmemoración es una de las principales en el calendario de la Iglesia católica dominicana, que celebra oficios en cada templo tanto en la mañana como en la tarde.
Las ceremonias oficiales fueron encabezadas por el presidente dominicano, Leonel Fernández, y su esposa, Margarita Cedeño, y de la que también participaron políticos como el candidato a la vicepresidencia del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Luis Abinader.
El obispo de la diócesis de Higüey, Nicanor Peña Rodríguez, ofició una misa en la que llamó a los políticos a desarrollar una campaña electoral constructiva y dejar de lado el discurso agresivo, según lo publican los medios de prensa en sus páginas electrónicas.
"Debido a las dificultades que rodean el mundo, los dominicanos deben clamar por la ayuda y la protección de la Virgen de la Altagracia", expuso el religioso.
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