Sacerdote da la cara y luego desaparece

Constanza. El sacerdote Juan Manuel de Jesús Mota (Padre Johnny) decidió ayer dar la cara al presentarse ante la Fiscalía de aquí para responder por las acusaciones de supuestas violaciones de 15 mujeres.El cura católico dijo que acudía para ponerse a disposición de la Justicia en cualquier investigación que se quiera abrir en su contra.

El padre Johnny se presentó junto a su abogado, Bienvenido Concepción, y  fue recibido por el fiscal adjunto, José Iván Batista, y permaneció en la Fiscalía por espacio de quince minutos. El representante del Ministerio Público aclaró que como no hay orden de arresto por las denuncias de supuesto abuso contra varias menores en el grupo de mujeres con las cuales presuntamente tuvo relaciones sexuales no podía dejarlo detenido.

Mediante un comunicado de prensa, que al parecer dio a conocer el religioso, este negó las acusaciones en su contra.

“No estoy escondido, ni huyendo, una vez vi las acusaciones y denuncias, acudí a la capital a la Procuraduría General de la República, donde la magistrada Marisol Tobal, Procuradora General y Coordinadora Nacional para los Casos de Niños, Niñas, Adolescentes y Familia, encontrándome con la información de que la magistrada está de licencia médica prolongada”, apuntó.

Defensa

Ante las denuncias, el obispado de La Vega decidió enviar a Constanza al padre Andrés  Batista, quien ahora funge como párroco en la Cátedral de San Pedro.
En Constanza el padre Johnny es defendido a capa y espada por sus más cercanos colaboradores y los beneficiados con las obras sociales que hizo en favor de familias de escasos recursos económicos.

El diácono Adriano Abreu cita entre las obras hechas por el sacerdote la construcción de diez casas a familias que viven en zonas vulnerables. 

“Lo que sucede es que él ha venido haciendo una gran labor social y denunciaba la grave descomposición social y eso le acarreó malestar en algunos sectores de Constanza”, sostuvo Abreu, al hablar con reporteros de elCaribe.

 Entre las beneficiadas figura Lucinda Margarín, quien ve en las acusaciones hechas al padre Johnny las malas intenciones de personas que buscan hacerle daño por su encomiable labor. Los feligreses dicen que están dispuestos a defender la honra del cura.

Abusadas advierten que seguirán el caso

Pese a la defensa que hacen al cura, dos de las víctimas atribuyen a la cobardía de algunos de enfrentar los supuestos abusos cometidos. Advierten que llevarán el caso hasta las últimas consecuencias, pues no dejarán que impere la impunidad.

En sus doce años de labor, el padre construyó las parroquias Divino Niño, Nuestra Señora de Fátima, capilla San Judas Tadeo, el centro de formación humana y la Santo Cura de Ars.DEL CARBE.COM