El proyecto de ley que declaró la necesidad de la reforma y que derivó en la nueva Constitución de la República, promulgada en el año 2010, fue aprobado sin contratiempos en el Congreso Nacional.
La propuesta del Poder Ejecutivo fue definitivamente convertida en ley por la Cámara de Diputados, el 11 de febrero del 2009, con el voto favorable de 102 legisladores. Solo los 32 legisladores del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que en ese momento era una fuerza determinante, así como el diputado reformista por La Romana, Frank Martínez, votaron en contra del proyecto que le envió el entonces presidente Leonel Fernández.
Una revisión a la crónica periodística de la fecha revela que la misma fue aprobada por los diputados de los Partidos de la Liberación Dominicana (PLD), Reformista Social Cristiano (PRSC), Fuerza Nacional Progresista (FNP) y otras organizaciones con representación en el organismo.
El proyecto había sido aprobado en primera lectura el día 27 de enero que le antecedió y antes lo había hecho el Senado, donde inició y donde fue sancionado por la mayoría absoluta.
Antes de aprobarlo, los diputados aplazaron su conocimiento acogiendo una recomendación del presidente Leonel Fernández, para hacerle una revisión. El proyecto no recibió el tratamiento de una ley orgánica, ni tampoco de una ordinaria, como se discute en la ocasión.
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