El lanzador del béisbol de las Grandes Ligas Alfredo Simón Cabrera, dijo ayer que deja en manos de Dios, el Topoderoso, todo cuanto hayan dicho de él, porque cada día está más claro que “yo no maté a nadie”.
Simón Cabrera está acusado de haber disparado y matado al joven Michael Castillo Almonte, de 25 años y herido a su hermano Starlin Castillo Hernández, de 17 años, en un hecho de sangre ocurrido el 31 de diciembre pasado, en medio de las celebraciones de año nuevo, en su comunidad natal, Luperón, Puerto Plata.
Ayer se conoció la audiencia del caso por homicidio involuntario, pero en vista de que ninguno de los testigos del Ministerio Público, ni los dolientes asistieron al tribunal, los jueces transfirieron el mismo para el 18 de octubre.
Simón Cabrera dijo que “soy un joven trabajo de nacimiento, que voy progresando y nunca he tenido problemas con nadie, además la persona que murió y yo éramos como dos hermanos”.
“Todavía no me explico por qué acusarme a mí de esa muerte, cuando muchí- sima gente disparó su arma al llegar el año nuevo. Yo solamente hice dos disparos frente a una discoteca, que está muy lejos del lugar, donde hirieron al amigo Michael Castillo Almonte”, reveló en público, por primera vez, Simón Cabrera.
El lanzador fue entrevistado en el programa Deportivissimo, que por ESPN-Radio Dominicana, producen los periodistas Héctor García, Ricky Noboa y Romeo González.
Simón Cabrera volvió a reiterar que “deja todo en manos de Dios. No tengo a nadie dentro de mi corazón, soy un hombre pacífico, pero me han hecho un gran daño, pues casi no puedo trabajar”.
Indicó que el equipo Orioles de Baltimore lo ha ayudado mucho, pues les tiene una persona que lo ayuda mentalmente.
Dijo que ayer mismo estaría de regreso a los Estados Unidos, para unirse a su equipo y aclaró que “me voy más tranquilo, porque las cosas se están aclarando y tanto las autoridades judiciales como todo el pueblo se están dando cuenta de que no maté, ni causé heridas a nadie”.
Reiteró que no es persona de las que se buscan problemas y dijo, que la tranquilidad que lleva consigo, de seguro que lo ayudará mucho de ahora en adelante, porque no tendrá que volver al país, ni estar pensando en otro juicio hasta pasada la temporada de béisbol de Grandes Ligas.
Simón Cabrera, quien era relevista de los Orioles de Baltimore, desde hace un par de semana fue transferido a la rotación abridora.
En la actualidad tiene marca de 2-2 y 4.36 de efectividad y ha hecho dos aperturas consecutivas.
El sábado pasado tiró siete entradas y permitió solo dos carreras en la victoria sobre los Indios de Cleveland.
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