Expresó que anualmente se producen en el mudo alrededor de 1.3 millones de micro temblores de magnitud dos y tres grados en la escala de Richter, sin que representen peligro.
El experto reveló que en los últimos meses se han producido hasta 40 micro temblores en 24 horas y hasta 60 en una semana en zona de La Romana, Bayahibe, la Isla Saona, Boca de Yuma y una parte importante del Canal de la Mona.
Atribuyó el fenómeno a que la zona Este de la isla Hipaniola es la más cercana a la fosa de milwaukee, la de más actividad sísmica de mediana intensidad en los últimos años en el país.
Indicó que esa gran actividad sísmica es producto de que la placa tectónica de Norteamérica penetra por debajo de la placa tectónica del Caribe y permanentemente produce pequeñas rupturas geológicas.
Aseguró que esas rupturas liberan energía elástico a lo largo de la fosa de Milwaukee que , a su vez, producen ondas sísmicas que son recibidas en forma de micro temblores.
“A eso se suma el hecho de que en la franja Sur-Este de la isla Hispoaniola tenemos el límite Norte de la Trinchera de los Muertos, la cual en otros proceso de subtucción rompen parcialmente algunos fragmentos de corteza terrestre y eso produce micro temblores en la zona Este”, expresó.
Osiris de León indicó que, “en la medida en que se produce la liberación permanente de energía en la fosa de milwaukee y en la Trinchera de los Muertos, se producen permanentes micro temblores, que no llegan a producir daños en las estructuras civiles, debido a su escasa magnitud”.
No obstante, el catedrático universitario expresó que la población dominicana debe estar preparada para un gran temblor de tierra y que, por consiguiente, el Estado debe implementar una campaña de orientación permanente para que la gente sepa qué hacer antes, durante y después de un fenómeno natural de ese tipo, principalmente, aquellos que residen en las zonas costeras de baja altura, los cuales se exponen a inundaciones.
Recordó el terremoto que causó grandes destrucciones en Japón, en marzo de este año.
“La orientación a la población debe estar cimentada en un amplio programa de educación sísmica por parte de los ministerios de Educación y Obras Públicas”, dijo.
Consideró que la población debe conocer los peligros a que se expone cuando construye edificaciones sobre suelos blandos y la seguridad que representa edificar sobre rocas, en el caso de un sismo de 8.1 grados en la escala de Richter.
De León insistió en que las personas que viven en las orillas de los ríos, cerca de la desembocadura del mar, son susceptibles al oleaje que produce un maremoto.
Recordó que el terremoto del 4 de agosto de 1946 produjo un maremoto que destruyo la comunidad de Matanzas, en nagua.
Otro maremoto destruyó la isla de Manzanillo, en 1842 y anteriormente, en 1751, Azua.
Credenciales
Osiris de León es ingeniero geólogo, miembro del consejo de directores de la Academia de Ciencias y coordinador de la Comisión de Ciencias Naturales del organismo. Fue administrador de Marmolería Nacional, de la Fábrica de Cemento, sub-gerente administrativo del Banco Central y embajador encargado de los asuntos generales de la Cancillería.
Fue secretario del consejo de administración de la Mina de Oro y Plata de la Rosario, y de 1987 a 1998 fue consejero científico de la Comisión Nacional para el Medio Ambiente.
La fosa de Milwaukee
La Fosa de Milwaukee es la de mayor profundidad de la trinchera de Puerto Rico y tiene más de 8 kilómetros de profundidad. Es el punto más profundo de todo el Océano Atlántico.
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