Transcurrido un año, las autoridades no saben a ciencia cierta la causa de la muerte de dos abogados, cuyos cadáveres fueron encontrados de forma simultánea el 16 de febrero del año pasado, uno en su casa y otro en su oficina, en los kilómetros 11 y 13 de la autopista Duarte.
Aunque desde el principio se ha dicho que los abogados Fausto Morel Matos Matos y René Vegazo murieron envenenados, la Fiscalía del Distrito Nacional aún no tiene un dato cierto, ni se sabe si se trató de suicidio u homicidio.
El entonces fiscal del Distrito Nacional y hoy juez de la Suprema Corte de Justicia, Alejandro Moscoso Segarra, encomendó una experticia a un laboratorio de Puerto Rico, pero un año después no se han dado a conocer los resultados.
Por el caso, unas 15 personas fueron investigadas por la Policía, pero luego fueron libertadas, en vista de que no se encontró nada comprometedor.
Entre las personas que fueron investigadas por la Policía estuvieron la secretaria del bufete Matos y la novia de Vegazo.
Los agentes que investigaron el caso no descartaron que los dos hombres fueran envenenados, pues no presentaban signos de violencia.
El cadáver del doctor Matos y Matos, de 42 años, fue encontrado sentado en una butaca del residencial Villa Florinda, de Manoguayabo, en Santo Domingo Oeste, donde vivía solo, mientras que el cadáver de René Vegazo fue hallado ese mismo día por su secretaria.
Según José Antonio Lebrón, suegro de Matos, hacía un año que a éste le quemaron un vehículo y luego adquirió una camioneta Ford Explorer, a la que le echaron “ácido del diablo” y también habría recibido amenazas de muerte de parte de personas que no identificó.
Los dos abogados llevaban casos inmobiliarios, administraban el dinero de un cliente que les había exigido la devolución del mismo.
Se precisó que Vegazo defendía el caso del propietario de un hotel de Samaná, del que supuestamente un narcotraficante quería apoderarse.
Envenenamiento
Las autoridades dan por seguro que se trató de un envenamiento, pero no han determinado si fue ocasionado por homicidio o por suicidio. Se mandó a hacer una analisis a un laboratorio especializado en Puerto Rico, pero aún están a la espera o no se han dicho los resultados.
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