Un cementerio de OMSA

Este es un cementerio de la OMSA. Decenas de autobuses languidecen en talleres y depósitos de esa institución, según se pudo comprobar durante un recorrido por propiedades del organismo estatal. Millones y millones de pesos

El director de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA),   Ignacio Ditrén, rehusó referirse al reportaje sobre   la nómina  que publicó HOY en su edición de ayer porque alegadamente hay inexactitudes  con la relación a la cantidad de autobuses que tiene  esa institución.

A través de su gerente de Relaciones Públicas, Yovanny Ventura, afirmó que  la OMSA cuenta con 300 autobuses, pero en su página web establecen que a diciembre eran 137.

En la nómina de la OMSA  aparecen 3,659 empleados para una relación de 27 por cada autobús. Hay en la institución  758  conductores y 713 cajeros de abordo nombrados.

Ventura prometió un informe detallado sobre el personal de la OMSA. También justificó la cantidad de 36 empleados en la División Médica de la OMSA, alegando que éstos están diseminados en siete unidades de la institución y además que con frecuencia realizan operativos médicos.

Dijo que aunque cuentan con seguro médico, los conductores y cobradores requieren de manera recurrente atención primaria por el tipo de trabajo que hacen y se les asiste para que no tengan que interrumpir su jornada acdiendo a una clínica.

Deterioro.  Decenas   de autobuses   languidecen en talleres y depósitos de esa institución, según se pudo comprobar durante un recorrido por propiedades del organismo estatal.

Tanto en la sede central, en  la avenida 27 de Febrero, en Las Caobas, como en los talleres del kilómetro 9 de la Autopista Duarte, en la terminal de la Carretera Mella, en Santo Domingo y en el depósito próximo al hipódromo Quinto Centenario, se puede observar el cúmulo de autobuses en franco deterioro. 

Muchos de los vehículos  están fuera de servicio a veces por pequeños detalles según explicó un empleado  de la sede central de la OMSA que no quiso identificarse por temor a represalias.

En la  terminal de la Carretera Mella muchos  de los vehículos son puras chatarras, algunos cubiertos por la maleza.

Cuando llegan a los talleres, desaprensivos  saquean algunas unidades y se llevan las piezas que aún tienen valor.

Poco transparente

Julio César de la Rosa Tiburcio, presidente de la Alianza Dominicana contra la Corrupción (Adocco) criticó que mientras el transporte público sigue siendo deficiente, la OMSA sea usada para colocar gente del  partido en el poder que no justifican su salario y que absorben parte del subsidio a esa entidad. Cuestionó además la falta de transparencia en el  alquiler de vehículos y de la licitación para adquirir 300 autobuses.  DEL PERIDICO HOY