La UASD publica un informe sobre efectos violencia RD

Según el estudio “Auge de la Violencia Armada en la República Dominicana”, de la autoría de Mayra Brea y el ex rector Edylberto Cabral, la proliferación de armas de fuego se ha transformado en un detonante de la violencia

SANTO DOMINGO.- La proliferación de armas de fuego en el país, legal e ilegal, se ha transformado en un detonante de la violencia, lo que ha ocasionado daños cuantiosos a la economía dominicana, pérdidas humanas y una larga secuela de personas lesionadas.

los datos están contenidos en un estudio publicado por la UASD sobre el “Auge de la Violencia Armada en la República Dominicana”, de la autoría de Mayra Brea y el ex rector Edylberto Cabral.   

El informe fue dado a conocer durante una jornada de investigación realizada en el Centro Universitario Regional del Nordeste (CURNE), de San Francisco de Macorís.

Tras determinar el impacto negativo de la violencia en la calidad de vida de los habitantes, el estudio consideró que esa situación se ha convertido, además, en un poderoso obstáculo para el desarrollo económico, social y humano en la mayoría de los países latinoamericanos y caribeños.

Brea explicó que en los últimos once años los actos delincuenciales y la adquisición de armas de fuego por parte de la población civil han aumentado considerablemente, pasando la tasa de homicidios de 13.09 a 25.10, e incrementándose las armas legales en un 557 por ciento.

“En este último período de 11 años se observan tres comportamientos: Una primera etapa muy expansiva de la violencia entre el 2000-2005, una segunda de disminución y estancamiento entre 2006-2007 y una nueva tendencia de incremento de los homicidios del 2008 al 2011.

“En la actualidad, la tasa de homicidios ya rebasa las 25 muertes por cada 100 mil habitantes, situación muy peligrosa, por ser un período de recuperación muy frágil de la economía mundial y de desaceleración del crecimiento de la economía dominicana”, dijo Brea.

Explicó, además, que la tasa de homicidios en el país supera ya la de trece países latinoamericanos, como Argentina, Brasil, México, Chile, Perú, Ecuador, Bolívar, Uruguay, Paraguay, Costa Rica, Panamá, Nicaragua y Cuba y solo superada por Colombia, Venezuela, El Salvador, Guatemala y Honduras.