El juez Kelvis Henríquez, del juzgado de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste, aplazó para el próximo miércoles la solicitud de medida de coerción en contra de Mariano Antonio Muñoz, acusado de enviar tanques desde Estados Unidos en cuyo interior fueron encontradas varias armas de fuego.
El magistrado tomó la decisión tras acoger un pedimento del abogado del imputado Marcelino Vargas Brito, a fin de preparar presupuestos que pueda rusticar la libertad de su cliente.
La audiencia fue fijada para las 2:00 de la tarde.
En la audiencia, el Ministerio Público (MP), no se opuso al aplazamiento de la audiencia donde estaba presente la fiscal titular de Villa Altagracia, Dilma Díaz, quien que lleva el caso del asesinato de la pareja de esposos.
Se informó que la fiscal Díaz conversó con el fiscal investigador a fines de conocer detalles del caso y reforzar la seguridad en su jurisdicción.
A la salida del tribunal, el imputado bajo estricta medida de seguridad y el rostro cubierto, se rehusó hablar con los medios de comunicación mientras era trasladado a la cárcel de paso donde se encuentra recluido.
El imputado habría admitido ser el dueño de las armas y explicó que las trajo porque “estaba lleno de ira al entender que no se hizo justicia con la muerte de su hija”.
Muñoz es el padre de la joven Elizabeth Muñoz, asesinada junto a su esposo Joel Díaz en abril del 2021 en Villa Altagracia, a manos de agentes policiales.
La predicadora Elisa Muñoz y su esposo regresaban de una campaña evangélica y los agentes policiales «habría confundido el vehículo con otro que perseguían».
Además, resultaron heridos otros tres predicadores que viajaban en ese vehículo, de acuerdo con las informaciones no oficiales.
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