SANTO DOMINGO (Rep. Dominicana)- Cuando el derecho de las Águilas Cibaeñas Ángel Castro realice el primer lanzamiento esta noche en el Estadio Cibao, quedará formalmente iniciada la edición 63 del Campeonato de Béisbol Profesional de la República Dominicana.
20 de octubre, día del cumpleaños 79 del inmortal de Cooperstown Juan Marichal, fue la fecha señalada por los organizadores del campeonato deportivo más trascendente del país. Un evento que superó la transición de la dictadura a la democracia, que supo lidiar con severas crisis económicas que colocaron su continuidad en el borde del abismo, y que ha soportado innumerables críticas por las exageradas otroras dependencias estatales que han ido desapareciendo en la misma medida que este fue logrando su autosuficiencia.
El béisbol es para una parte importante de los dominicanos lo más importante de las cosas menos importantes. Un bálsamo de doce meses (LIDOM y GL) que ayuda al pueblo a olvidar momentáneamente los cotidianos despropósitos que parecen interminables en una sociedad acostumbrada al caos.
El campeonato otoño-invernal que inicia con el partido Gigantes vs Águilas es inédito. Marcará un antes y un después de una nueva era en donde la tecnología manda, impone y exige.
Se recurrirá por primera vez a la regla de revisión de las jugadas cerradas, lo que amerita un tipo de transmisión de televisión con más cámaras y con mejores recursos tecnológicos para que los árbitros (todos serán criollos) dispongan de varios ángulos para observar la jugada y así llegar a un veredicto justo.
30 segundos será el tiempo límite para que los coach de picheo y manager conversen con los lanzadores tras subir al montículo. Una medida que busca acelerar un juego criticado por parsimonia que trata de manera desesperada disminuir las más de tres horas acostumbradas de cada partido.
Las barridas agresivas en las bases serán sancionadas con expulsión. La Liga busca preservar la integridad de sus jóvenes jugadores, muchos de ellos promesas de los equipos de las Grandes Ligas que reciben permisos para jugar en el país con el propósito de acelerar su desarrollo.
El campeonato que inicia no es uno más. Es diferente. Cada uno de los equipos busca la corona por diferentes motivos. Las Águilas, ahora con Manny Acta como principal diseñador de la novena, busca terminar con la sequía de nueve años sin celebrar un campeonato en el Monumento, los Gigantes están cumpliendo 20 años en el campeonato, las Estrellas sueñan con darle el primer título a varias generaciones de petromacorisanos que han nacido tras aquella lejana corona conquistada en la temporada 1967-68, los Toros buscan con el dirigente Mike Guerrero la mística que les ha faltado los últimos años, los Tigres desean olvidar el agridulce pasado campeonato, y los Leones quieren repetir la corona conquistada.
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