Al motorista le dispararon porque llevaba un casco marrón

La versión de la mujer que fue víctima este miércoles de un atraco en la avenida Winston Churchill dice que quien le robó su cartera vestía de negro y llevaba un casco marrón, razón que un agente de la Autoridad Metropolitana de Transporte alega fue suficiente para disparar en contra del mensajero Issael Rossó Peña, quien llevaba un casco del mismo color, en la misma vía y a la misma hora, además de que no se detuvo de inmediato cuando se lo ordenaron.

En declaraciones a la prensa, la señora Martiza Alvarez narró que un hombre en una motocicleta se le paró al lado del vehículo en que se desplazaba, en eso de las 8:00 de la mañana, y le arrebató la cartera. Agrega que de inmediato emprendió la huida y lo siguieron hasta la intersección de la Churchill con 27 de Febrero.

“Mientras lo seguíamos le gritábamos que se parara y no lo hacía. Hasta se llevó un semáforo en rojo. Entre los gritos un agente de la Amet le pidió tres veces al motorista se detuviera, pero no lo hizo. El policía disparó tres veces para asustarlo y al ver que no se detuvo, le disparó por la espalda”, contó Alvarez.

Al ser interpelada sobre si puede asegurar que quien la atracó fue el mismo al que el agente le disparó, dijo “el que yo le gritaba que se parara fue el mismo que hirieron”.

Los periodistas presentes en la conferencia de prensa -organizada por la Amet- le dijeron a la mujer que al llegar a la avenida 27 de febrero habían dos motoristas con las mismas características y que uno de ellos dobló a la izquierda en sentido a la avenida Abraham Lincoln, mientras que el otro, el mensajero, siguió su ruta normal.

Al preguntarle por la cartera que supuestamente le robaron, la señora argumentó que los testigos le dijeron que el motorista se la dio a otra persona.

De su lado, el presidente de la Federación Nacional de Motoconchistas (Fenamoto), Oscar Almánzar, desmintió rotundamente esta versión tras asegurar que el joven herido labora para la empresa “Tasker”, una compañía que se dedica a mensajería, ubicada en la Torre Acrópolis.

“Lo que quieren es ensuciar su imagen. Eso es mentira. Ese joven es un mensajero que se gana la vida trabajando”, aseguró Almánzar.

A su juicio, la Autoridad Metropolitana siempre trata de justificar los actos abusivos que ejecuta en contra de los motoristas, por lo que la ciudadanía ya no soporta más abusos de este organismo.


Suceso: testigos vs Amet

Según los vendedores informales de la esquina, el mensajero Isael Rossó, de 25 años de edad, conducía su motor de sur a norte por la Churchill cuando fue mandado a detener por un agente de la Amet que creyó era el asaltante que segundos antes le había quitado la cartera a una señora que pidió ayuda.

“Ese hombre venía subiendo y había arrancado, no podía parar, o iba a chocar, entonces cuando se paró ahí (señalando la acera) vinieron de una vez los agentes y le dispararon cuando estaba sacando los papeles” contó Bienvenido Martínez a Z101digital.com.

Vendedores de periódicos, limpia vidrios, pedigüeños, entre otros que hacen vida en la esquina, sustentan la versión de Martínez.

Todos coincidieron en que el motorista se detuvo al cruzar el semáforo y que se disponía a sacar su cartera para mostrar sus papeles a los agentes, cuando sin mediar palabra fue impactado por una bala en la espalda. “Decía: no me dejen morir, por favor no me dejen morir”, dijeron varios de los vendedores.

El director de la Amet se comunicó con El Gobierno de la Mañana a través del teléfono y acusó al motorista de ser un ladrón, informó que estaba herido y que había sido llevado al hospital Darío Contreras.

Algunos ciudadanos que pasaban por el lugar al momento del suceso también llamaron al programa y desmintieron la versión oficial: “Ése hombre no era un atracador como están diciendo”, dijo una radioyente vía telefónica que llamó para describir la forma en que el motorista Isael Rossó recibió las heridas que le mantiene en condición crítica en el Hospital Central de las Fuerzas Armadas.

El agente que hizo el disparo fue identificado como el primer teniente de la Fuerza Aérea, adscrito a la Amet, Edgar Virgilio Félix Pallano quien está detenido en el Departamento de Homicidios de la Policía.

Según José Jáquez, vocero de la Amet, la señora Martiza Alvarez y su esposo Luis Fabián, viajaban con el vidrio bajo, lo que habría aprovechado Rossó Peña para llevarle la cartera.

Según las versiones de Jáquez, miembros de la Amet y de la Policía hicieron varios disparos al aire y que Rossó Peña le "tiró el motor encima a los agentes".

Rossó Peña fue herido en la espalda por el oficial Félix Pallano y está recluido en el hospital Central de las Fuerzas Armadas, donde fue intervenido quirúrgicamente y se encuentra en estado de “coma” desde la 1:30 de la tarde.

Amenaza de muerte

Oscar Almanzar responsabilizó de cualquier cosa que le pase al jefe de la Amet, mayor general José Aníbal Sanz Jiminián, ya que asegura ha recibido amenazas en contra de su vida por las declaraciones que ha hecho contra este organismo.

Minutos después del accidente, cientos de motoristas se conglomeraron en la escena del incidente y arrojaron basura a las calles, como forma de protesta por lo que ellos consideran es un abuso de la Amet en su contra.

Esta mañana, el presidente de Fenamoto aprovechó la presencia de los medios de comunicación para pedir la destitución del jefe de la institución metropolitana, lo que entiende ha desembocado las amenazas en su contra.