“El miércoles 31 de mayo de 1961 Trujillo viajaría a San Cristóbal, porque nunca viajaba los martes... Toma esa decisión la tarde del martes, de modo que los complotados estaban preparados para el día siguiente y muchos no estaban en ciudad Trujillo”, destacó el escritor en Voces Propias en la Z.
Raful señaló que Antonio de la Masa no pensaba que iba a ocurrir el hecho, que llegó el martes a la Ciudad Trujillo desde la frontera, donde manejaba un aserradero, a buscar una licencia médica con el fin de tener permiso justificado para su presencia en la capital.
“Los ajusticiadores logran determinar que Trujillo viajaría a San Cristóbal el martes 30 a través del Teniente Amado, que trabajaba en Palacio, él comunica el viaje y él se da cuenta porque el tirano se puso el traje específico que usaba cuando iba a San Cristóbal”, precisó.
El también exministro de Cultura indicó que el ajusticiamiento del déspota se había pospuesto varias veces, pero que ese día se precipitaron los acontecimientos y quienes conformaban el complot accionaron.
Raful cosideró que el 30 de mayo es una fecha inspiradora para República Dominicana y que con el ajusticiamiento de Trujillo el país pasó a otra etapa, por lo que se debe reconocerse el papel histórico de quienes le dieron muerte.
“Tenemos que celebrar el ajusticiamiento del tirano más despiadado del Caribe y Latinoamérica, que mandaba a matar personas hasta fuera del país. La muerte de las hermanas Mirabal fue la gota que derramó el vaso”, sostuvo.
“El Jefe”, nunca más
Con relación a los pronunciamientos que muchos hacen en favor de que vuelva al país una dictadura como la de Trujillo, Tony Raful consideró que esto se debe al clima de inseguridad que vive República Dominicana.
“La gente no debe olvidar que Trujillo limitaba el pensamiento, con crímenes y torturas, de modo que era una seguridad aparente... la muerte de Trujillo abrió las compuertas de la libertad”, opinó Raful.
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