La propuesta del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, de abrir un debate internacional que podría tocar la legalización de las drogas despertó nuevas discusiones en su país, principal productor mundial de cocaína, que constata el fracaso de las políticas prohibicionistas.
“Seguiremos luchando con todo lo que tenemos contra el tráfico de drogas porque para nosotros es un problema de seguridad nacional”, dijo Santos esta semana en una visita a Londres.
Pero, agregó, “así como nosotros hemos sido muy efectivos y exitosos en la lucha contra el narcotráfico, las drogas siguen fluyendo, siguen exportándose, siguen consumiéndose”.
Una “discusión franca y abierta sobre diferentes formas para combatir ese flagelo” sería “útil” y “bienvenida”, instó Santos, al recalcar que el debate “debe darse a nivel internacional y con todos los países presentes”.
Sus declaraciones fueron rechazadas por el ex presidente Álvaro Uribe, quien durante sus dos periodos de gobierno, de 2002 a 2010, impulsó con Estados Unidos el Plan Colombia de lucha contra las drogas, mediante el cual Washington ha desembolsado a Bogotá unos 6,000 millones de dólares en 10 años. “Legalizar: que no se creen más riesgos a las familias colombianas, a los niños, a escuelas y colegios objetivos de microtráfico”, escribió Uribe en Twitter. “.Legalizar: entonces habrá comercio legal de marihuana e ilegal de heroína y cocaína”, “.Legalizar: a cualquier precio la siembra de narcóticos legales puede destruir nuestrta Amazonía”, fueron otros de sus mensajes.DE.AFP
No hay comentarios:
Publicar un comentario