Decenas de mujeres que marcharon hoy desde el Parque Independencia al Palacio Nacional, se quejaron porque la Policía les impidió concentrarse frente a la casa de gobierno, y en una actitud de rechazo se sentaron en plena avenida México esquina 30 de Marzo.
Luego de una larga conversación con los agentes, una comisión integrada por Ruth Medrano, Rosa Elena Moreno y María del Orbe entregó el manifiesto con sus reclamos a la viceministra de la Presidencia, Sandra Severino, quien prometió hacerle llegar el documento al presidente de la República.
A su salida dijeron esperar que el primer mandatario no solo lea el manifiesto, sino que lo ponga en práctica. También se quejaron porque su manifestación era pacífica y no les permitieron colocarse frente al Palacio Nacional.
Las mujeres pertenecen al Círculo de Mujeres con Discapacidad (CIMUDIS), el Centro de Solidaridad para el Desarrollo de la Mujer, (CE-MUJER), la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas, (Conamuca), el Centro de Investigación para la Acción Femenina, la Colectiva de Organizaciones de Santo Domingo Norte, entre otras de distintas zonas, como Boca Chica y los municipios que conforman el Gran Santo Domingo.
Piden en su manifiesto que el país sea declarado en estado de emergencia por la violencia de género que este año ha cobrado la vida de 211 mujeres a manos de sus parejas o ex parejas.
Las mujeres, acompañadas de estudiantes y algunos hombres, llegaron de forma pacífica hasta el parque ubicado en la referida intersección de la avenida México con 30 de Marzo, donde fue montado un cerco policial que les impedió llegar al Palacio.
Llamó la atención en la protesta que la joven periodista Patricia Báez, vestida con pantalones cortos y una camiseta sin mangas, levantaba una pancarta donde expresaba “no veas una puta donde hay una mujer liberada”.
La comunicadora sostuvo que el sistema marchista ha etiquetado de prostitutas a muchas mujeres que quieren salir del círculo de la violencia y con ese argumento le quitan la vida.
“Le ponen la etiqueta de prostituta, de mala madre, cuando esa mujer decide no seguir cumpliendo el rol de esposa abnegada a pesar de los maltratos, y esa etiqueta es previo a matarla y después que la matan dicen que la mataron porque era puta”.
En la marcha, por el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, participaron estudiantes de distintos planteles.
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