El Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, presidido por la jueza Ramona Natividad Santos, aplazó este viernes para el próximo lunes a las 9:00 de la mañana el juicio de fondo que se le sigue a los cinco estudiantes del Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (FELABEL) de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), acusados de la muerte del coronel Julián Suarez Cordero, durante unos disturbios en la casa de altos estudios el 23 de abril de 2013.
La presidenta del tribunal, tomó la decisión, a los fines de seguir interrogando al testigo, el segundo teniente Alexander Feliz, por parte del abogado de los familiares de Suarez Cordero y los abogados de los imputados.
Por lo que, el Ministerio Público, representado por los fiscales adjuntos Dante Castillo y Denny Silvestre, interrogó al testigo quien dijo que recopiló tres videos que subieron a la página Web de internet, que dio como contraste la muerte del Coronel Suarez, donde se ven unas personas que participaron en el incidente con pelucas.
Agregó el testigo que el informe lo firmó junto con el encargado del Instituto Nacional de Ciencia Forense (INACIF), luego lo enviaron a las autoridades del Ministerio Público.
Esto fue, luego de que los fiscales adjuntos presentaron la acusación formal ante el Tercer Tribunal Colegiado contra Héctor Eduardo Pichardo Hernández, Wilson Javier Daciel Nicasio, Diógenes Isidro Gutiérrez, Eddy Giovanny Bonilla y Víctor Alfonso González Hernández., miembros del Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (FELABEL).
Los representantes del Ministerio Público y el jurista Freddy Mateo, abogado de la familia de Suarez Cordero, señalaron que cuentan con 49 pruebas periciales, materiales e ilustrativas, así como documentales y testimoniales que demuestran la participación de los estudiantes de la academia en la muerte del coronel. Dijeron que esperan una condena de 30 años contra los implicados.
“Con los elementos probatorio que tenemos no hay otra decisión que no sea una condena de 30 años. De todos modos, me luce que el proceso no va a terminar en el día de hoy”, dijo Fredy Mateo, abogado de la familia del coronel Suarez Cordero.
Mientras que la parte la barra de la defensa de los imputados reiteraron que el proceso investigativo fue totalmente viciado y aseguraron que lo demostrarán en los tribunales.
“Hay intromisiones importantes y una vulneración o lo que se conoce como contaminación a la escena del crimen, que hace que todo este proceso nazca de una ilegalidad”, manifestó José Germán, abogado de Bonilla Cabrera.
De su lado, Tomás Castro, de la parte defensora de Gutiérrez Medina y Pichardo, entiende que como los fiscales son auxiliarles de la Policía, la Fiscalía no podría negar lo que la Institución del orden dice.
Suárez Cordero recibió un disparo en la cara cuando el 23 de abril del 2013 acudió a la UASD a controlar unos disturbios que escenificaban estudiantes.
Castro, ha sostenido en varias ocasiones que la Policía no tiene ningún elemento para acusar a los jóvenes porque no hay evidencias, ni armas de fuego, y que tampoco les pudieron hacer pruebas de absorción atómica que les probaran que ellos habrían disparado.
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