SANTO DOMINGO. El rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Iván Grullón, no fue recibido por la Comisión Bicameral del Congreso Nacional que estudia el proyecto de Ley de Presupuesto sometido por el Poder Ejecutivo, a donde acudió en procura de que le aumenten la asignación presupuestaria de 2015 a la academia.
El rector fue al Congreso en compañía de varios del personal administrativo de la UASD y llegó incluso a entrar al salón donde se encontraba reunida la Comisión Bicameral, sin embargo fue invitado a salir debido a que su visita no estaba programada y en ese momento atendían a representantes de la Cámara de Cuentas, que también fueron en búsqueda de más presupuesto.
Ya fuera del salón, el rector Grullón fue detenido en un pasillo en donde personal de protocolo del Congreso le explicaron las razones de por qué no podía ser recibido hasta convencerlo, luego de un rato, para que se marcharan.
Según el rector Grullón, la UASD requiere un presupuesto de 11 mil millones de pesos y apenas tiene asignados 6,400 millones de pesos. Aunque reconoce las limitaciones económicas del gobierno, reiteró los altos costos en que incurre esa institución para el mantenimiento de todas las oficinas administrativas y de los centros regionales.
Según Grullón, con el presupuesto actual la mayoría se va en pago de nómina, por lo que apeló al Congreso para que le puedan modificar las asignaciones.
El rector fue al Congreso en compañía de varios del personal administrativo de la UASD y llegó incluso a entrar al salón donde se encontraba reunida la Comisión Bicameral, sin embargo fue invitado a salir debido a que su visita no estaba programada y en ese momento atendían a representantes de la Cámara de Cuentas, que también fueron en búsqueda de más presupuesto.
Ya fuera del salón, el rector Grullón fue detenido en un pasillo en donde personal de protocolo del Congreso le explicaron las razones de por qué no podía ser recibido hasta convencerlo, luego de un rato, para que se marcharan.
Según el rector Grullón, la UASD requiere un presupuesto de 11 mil millones de pesos y apenas tiene asignados 6,400 millones de pesos. Aunque reconoce las limitaciones económicas del gobierno, reiteró los altos costos en que incurre esa institución para el mantenimiento de todas las oficinas administrativas y de los centros regionales.
Según Grullón, con el presupuesto actual la mayoría se va en pago de nómina, por lo que apeló al Congreso para que le puedan modificar las asignaciones.
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