Los arzobispos de Santiago, Ramón Benito de la Rosa y Carpio, y el de Mao, Valverde, Diómedes Espinal, consideraron que la reforma fiscal debe hacerse con equidad y que involucre a los que poseen riquezas.
Los sacerdotes exhortaron a todos los sectores a respaldar la reforma fiscal que el Gobierno contempla impulsar para agenciarse recursos que permitan ejecutar proyectos de desarrollo.
Los sacerdotes consideraron que esa acción debe contar con el apoyo y participación de todos los sectores de la vida nacional para que se haga mediante consenso.
Los obispos católicos consideran que los dominicanos “debemos aprender de otras naciones que han sabido repartir sus riquezas”.
De la Rosa y Carpio dijo que en la reforma debe existir equidad tras señalar que estas medidas son necesarias para destinar recursos a sectores que, como la educación, la agropecuaria, la salud y otras áreas son vitales para el bienestar de la población.
“Debe ser una reforma fiscal humana, o sea, que las riquezas deben repartirse con equidad y eso tiene que llegar tarde o temprano”, proclamó el arzobispo de Santiago al hacer entrevistado por periodistas en esa ciudad.
El arzobispo de Valverde señaló que si los recursos que genere la reforma fiscal van a ser destinados a sectores como la educación, “bienvenida sea”. Monseñor Espinal sostuvo que “si queremos un país en desarrollo hay que fortalecer la educación”.
En ese sentido, el prelado consideró como positivo el programa nacional de alfabetización que anunció el presidente Danilo Medina, al señalar que “la educación anda manga por hombre, y sin educación no hay desarrollo”.
Coincidieron en señalar en que la reforma fiscal debe hacerse con equidad.
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