SANTO DOMINGO.- Las autoridades dominicanas detuvieron a varios agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y de seguridad aeroportuaria de Santiago de los Caballeros acusados de permitir el transporte de más de mil kilos de cocaína, en aproximadamente ocho viajes, hacia Miami, Florida.
El presidente de la Dirección Nacional de Drogas (DNCD), mayor general Rolando Rosado Mateo, informó que “entre los involucrados se encuentran oficiales superiores y subalternos de la DNCD y del cuerpo especializado de seguridad aeroportuaria, quienes estaban supuestos a combatir el narcotráfico”. No especificó los nombres de los detenidos, pero dijo que todos ellos fueron remitidos a la Justicia.

Declaró que su arresto fue el resultado de una investigación realizada por la DNCD en coordinación con el Ministerio de las Fuerzas Armadas, el Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria de Santiago y el ministerio público de esa ciudad, la cual finalizó este jueves.

“La investigación arrojó como resultado que un personal puso al servicio del narcotráfico sus conocimientos para permitir el paso de más de mil kilos de cocaína en aproximadamente ocho viajes, que hayan sido identificados por la línea aérea Spirit”, dijo.

Rosado Mateo habló con periodistas durante el acto de graduación de 31 agentes de la DNCD y de la Dirección General de Aduanas, que realizaron un curso de capacitación avalado e impartido por la Embajada del Reino Unido en el país.

En la actividad, el presidente de la DNCD dijo que el conocimiento técnico no es una garantía de que se vaya a tener éxito en la lucha contra del narcotráfico, si no se valen de sus valores familiares y personales, que han sido tradicionales en el pueblo dominicano.
“La DNCD y las Fuerzas Armadas siempre van a estar atentos a la conducta de sus agentes y así como premian sus buenas acciones, también sancionarán a aquellos que traicionen la confianza que deposita la institución y el gobierno”, dijo.

Indicó que las FFAA y la DNCD están en guerra contra la corrupción interna y confían en que sus miembros no se vinculen con el enemigo, porque cuando se unen al narcotráfico “no saben si esa droga envenenará el cerebro de sus seres queridos”.