Nueva York: Tras asesinato de dominicano piden armar a 14 mil bodegueros

NUEVA YORK.- Tras el asesinato del bodeguero dominicano Juan Torres en un atraco a su negocio el sábado de la semana pasada, la Asociación de Bodegueros de los Estados Unidos (ASOBEU) y activistas comunitarios pidieron a la ciudad permitir que los 14 mil bodegueros registrados en Nueva York, consigan armas de fuego como forma de poder defenderse de los ladrones.

La petición fue hecha durante una rueda de prensa celebrada en el sectorHamilton Heitghs en la que participaron familiares de Torres, cuyos restos están siendo velados en una funeraria de Queens.
Ramón Murphy, presidente de ASOBEU, dijo que ha llegado el momento en que esos comerciantes necesitan que se les permita legalmente portar las armas para estar en condiciones de defenderse de los delincuentes que por años, los toman como blancos de atracos y asesinatos.
Albania Torres, sobrina del dominicano asesinado, dijo que la familia no quiere que a otrosbodegueros les ocurra lo mismo que a su tío.

Los activistas dijeron que si se arma a losbodegueros, los criminales lo pensarán dos veces antes de cometer sus fechorías.Torres, fue asesinado en la bodega de su propiedad – Lucky Grocery & Deli – situada en laavenida Merrick en el sector Laurelton de Queens, cuando un afro americano entre 30 y 40 añosde edad, le disparó en la cabeza luego de llevarse todo el dinero que había en la caja registradora.
Félix, un hermano de la víctima, salvó milagrosamente la vida.
El atracador homicida huyó a pie de la escena y todavía la policía no lo ha capturado. Cientos de volantes con el retrato hablado del sospechoso se han distribuido en el vecindario y áreasaledañas a donde se perpetró el crimen.

La Policía, dirigentes políticos, oficiales electos yactivistas comunales de esa zona en Queens, están pidiendo la colaboración del público para que ayude al arresto del delincuente.
“Por lo menos, los bodegueros de Nueva York tendrán la oportunidad de defenderse de sus atacantes”, añadieron los solicitantes en la conferencia de prensa. Las bodegas son consideradas por las autoridades como blancos fáciles de los criminales, debido a que en su mayoría están ubicadas en sectores vulnerables y con alto índice de delincuencia.
Murphy dijo que Torres perdió la vida porque no tenía un arma consigo para dispararle al atracador y asesino. “Hemos perdido a Juan Torres, un hombre enteramente dedicado a su trabajo y a su familia, de 54 años de edad y quien murió porque no estaba armado”.
Además, pedirán a los concejales crear una ley para que las cámaras de seguridad en las bodegas, sea una obligación legal de los propietarios de esos negocios.
En años anteriores y cuando José Fernández presidía ASOBEU, se estableció un programa de seguridad, entrenamiento e instalación de cámaras que ayudó a reducir la cantidad de atracos y asesinatos. Luego de la salida de Fernández de la institución, ese programa es prácticamente inexistente.
El alcalde Michael Bloomberg propuso recientemente que el Concejo Municipal permitauna cantidad de armas para evitar ser demandado por violación a la Segunda Enmienda de laconstitución de los Estados Unidos que da ese derecho a los ciudadanos.
Bloomberg, uno de los más acres críticos y combatientes contra el tráfico ilegal de armas en toda la nación, quiere que se establezca una tarifa para licencias de armas, especialmente pistolas, que oscile entre 340, 110 y 25 dólares por cada portador. Hasta el momento, los exámenes para civiles que buscan armarse legalmente en Nueva York, son uno de los más estrictos de todo el país.
Pero no todos los bodegueros están acordes con la petición. Uno de ellos, el pakistaní Elfak Mohamed, quien es dueño de una bodega en la avenida Amsterdam y la calle 145, rechazó la idea, diciendo que es una “locura” y que la mejor manera de garantizar la seguridad de él y los demás comerciantes es sacando a los criminales de las calles o desarmándolos.
Anunciaron que comenzarán una campaña por toda la ciudad para distribuir las solicitudes de permisos para armas de fuego, aprovechando la rebaja en los precios decidida por el Alcalde.