La Dirección Nacional de Presiones dispuso que los reclusos con sospecha de cólera en la cárcel de La Victoria fueran separados del resto de la población carcelaria para evitar contagio.
Aunque Prisiones dice que solo fueron siete los afectados con problemas intestinales, ayer el ministro de Salud, Bautista Rojas Gómez dijo que eran 13 los sospechosos de contraer la enfermedad.
La Dirección de Prisiones informó a través de una nota de prensa que cualquier interno que padezca trastornos intestinales, aún cuando no se trate de cólera, será separado de sus compañeros como medida preventiva.
Dijo que esa institución ha recibido todo el apoyo necesario del Ministerio de Salud Pública, representado por el vice Ministerio Juan Rodríguez, quien ha supervisado los trabajos de prevención y diagnóstico.
Agregó que en la actualidad realiza ornadas de sensibilización sobre la peligrosidad del mal incluyendo en algunos casos, si fuere necesario, la suspensión de la entrada de alimentos, y menores a los recintos, así como la suspensión de las actividades deportivas y de los traslados de internos a otros centros de privación de libertad.
Distintos equipos de la Dirección General de Prisiones fueron enviados por toda la geografía nacional con el propósito de llevar cloro y pastillas para purificar el agua de las cisternas, así como charlas educativas a interno, al personal de seguridad, civil y miembros de organizaciones voluntarias que realizan trabajos en las cárceles.
Las delegaciones se distribuyeron en la región Sur desde Pedernales hasta Najayo y las encabezaron el subdirector Tomas Holguín La Paz y Annelice Roa Howley, encarga del área médica de Prisiones.
Mientras en la región Noroeste la comisión estuvo integrada por el coronel de la Fuerza Aérea, José Ignacio Santana Morillo y personal médico de la DGP, y en el Este realizaron los trabajos el coronel de la Fuerza Aérea, Diógenes Ogando Ramírez.
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